«A Pescado dormilón, se lo traga el tiburón»
Refrán Popular
De Sevilla
Sobre la historia de los Soldaditos de Pavía, nadie se pone de acuerdo; unos hablan de cierta tasca en la calle Tetuán de Madrid, frecuentada por unos soldados vestidos de amarillo y de donde derivó el nombre de la fritura. Haciendo mención al uniforme que llevaban los Húsares de los Tercios Españoles que combatieron en la Batalla de Pavía en 1525 y que se mantuvo hasta bien entrado el siglo XIX.
Autores gastronómicos del prestigio de Néstor Luján mencionan que el nombre de la fritura nada tiene que ver con la batalla, sino con los trajes de los Húsares.
A finales del siglo XIX, en Sevilla y Madrid, se denominan «Soldaditos de Pavía» a unos pastelillos fritos que por su aspecto y cuyo color hacen referencia al Regimiento de Húsares de Pavía.
Habiendo de trasladarnos desde 1718 hasta 1844 aproximadamente, cuando el amarillo azafrán imperaba en las ciudades de Sevilla y Madrid en las tardes de paseo, y en donde los soldados lucían tan llamativo uniforme, bautizándose dicha fritura, y manteniéndose en el tiempo, con el nombre de «Soldaditos de Pavía».
También hay que añadir que desde finales del siglo XIX y hasta finales del XX, en Sevilla se diferenciaban los pavías de bacalao y merluza por el artículo que precedía al nombre, es decir; se denominaba La pavía a los elaborados con merluza y El pavía a los elaborados con bacalao.
INGREDIENTES
Receta Primera:
Medio kilo de lomo de bacalao al punto de sal
Medio kilo de harina especial para rebozados.
Dos vasos de agua
Un vaso de cerveza
Media cebolla picada
Dos dientes de ajos
Perejil
Sal
Aceite para freír
Harina de freír
Receta Segunda
Medio kilo de lomo de bacalao al punto de sal
Doscientos gramos de harina
Un vaso de agua
Quince gramos de levadura en polvo o un paquete pequeño de Royal.
Tres cucharadas de aceite de oliva.
Aceite de oliva para freír
Receta Tercera:
Medio kilo de Bacalao desalado.
Azafrán
Dos dientes de ajos
Comino molido
Una cucharada de harina tamizada
Dos cucharadas de vinagre
Sal
Un poco de agua
Perejil fresco
Aceite de oliva virgen extra
Tres claras de huevos.
ELABORACIÓN
Se puede comprar el bacalao ya desalado y posteriormente se corta longitudinalmente para luego cortar los trozos a la medida habitual, unos seis centímetros aproximadamente.
Si lo compramos salado lo dejaremos en remojo 24 horas, cambiándole el agua tres veces, durante el tiempo de remojo.
Existen varios tipos de bacalao en el mercado recomendados para esta receta; bacalao fresco, bacalao desalado, bacalao a punto de sal o bacalao congelado.
Para la primera receta:
En un recipiente se prepara el líquido para rebozar. Se mezcla la cebolla y el ajo muy picados, un poco de sal, perejil picado, el agua y la cerveza. Se mezcla todo con la ayuda de una batidora manual o también se puede hacer en la Túrmix. Hasta lograr una textura cremosa.
Dejar reposar unos quince minutos y freír en aceite caliente; 175º grados.
Escurrimos el aceite del pavía en la espumadera.
Papel de absorber y presentamos.
Para la segunda receta:
Para el rebozado: Ponemos la harina en un bol grande y le hacemos un hueco en el centro. Le añadimos una pizca de sal, la levadura en polvo, las tres cucharadas de aceite y el vaso de agua fría.
Mezclamos todos los ingredientes hasta conseguir una masa homogénea, sin grumos.
Dejamos reposar la mezcla, tapada, en un lugar templado durante 15 minutos.
A continuación, se bañan las tiras de bacalao en la masa, dando juego con el movimiento de la mano, mientras sostenemos las tiras de bacalao con los dedos.
Escurrimos las tiras de bacalao en el borde del recipiente y freímos en abundante aceite caliente.
Freímos en aceite caliente, unos 175º grados
Escurrimos el aceite del pavía en la espumadera.
Papel absorbente y presentamos.
Para la tercera receta:
(La más elaborada)
Se hace un majao con el azafrán, el ajo y el comino, al que se le añade la cucharada de harina y se remueve muy bien.
En un recipiente aparte el cuarto de kilo de harina tamizada, el vinagre, la sal, el agua, el perejil y por último la mezcla del majao.
Se trabaja muy bien la masa, procurando que quede espesa.
Se montan a punto de nieve las tres claras de huevo y se incorpora a la masa.
Mesclamos todo de nuevo.
Se deja reposar unos quince minutos.
A continuación, se bañan las tiras de bacalao en esta mezcla, dando juego con el movimiento de la mano, mientras sostenemos las tiras de bacalao con los dedos; escurrimos bien en el borde del recipiente y freímos en abundante aceite caliente.
Escurrimos el aceite del pavía en la espumadera.
Papel de absorber y presentamos.
Imagen tomada del Correo de Andalucía
Pavías de la Hermandad de la Sacramental en Tomares
OBSERVACIONES
He procurado ser lo más fiel posible a las recetas tradicionales.
Me ha llamado la atención que también hay recetas antiguas en las que se incorporaban un chorreón de aguardiente a la masa.
Pimienta blanca también lo he oído por ahí que se suele utilizar.
Macerar el bacalao en limón con ajo picadito también es usual de encontrarlo.
La salsa por excedencia y de acompañamiento es la mayonesa.
Se puede acompañar con unos tomates aliñados.
(Continuara)
Un típico súper típico pero siempre ideal. A mi me encanta para picar con los amigos, importante un pescado rico y un rebozado perfecto, como se ven los tuyos.
ResponderEliminarBesotes
Me fascinan los soldaditos. He intentado dejar un comentario antes pero no me ha permitido, no sé por qué.
ResponderEliminarLa conclusión era esa, que se ven perfectos.
Besotes
Interesante para la cuaresma.
ResponderEliminarSi Amiga, muy importante el pescado, particularmente la merluza o el bacalao. Luego la fritura, ya sabes; aceite muy caliente y buen rebozado.
ResponderEliminarGracias, Ricardo
Supongo Miss que es cuestión de la informática. De vez encuando nos hace pasar malas pasadas jejeje
ResponderEliminarBesos Ricardo.
Amigo Marcos, el bacalao de una manera u otra siempre ha estado presente en la cocina de cuaresma.
ResponderEliminarInvestigaré un poco.
Saludos Ricardo
Gracias por la receta. Espero hacerla en cuanto se desale el bacalao....pero, por favor, revisa los acentos y otros errores de escritura.
ResponderEliminarMuchas gracias por avisar amigo/a vaya si lleva tiempo colgado.
ResponderEliminarLo escribiría en la cocina a toda pastilla y lo actualizaría sin repasarlo.
En seguida me pongo en ello.
Saludos Ricardo
¡Hola! Buscaba una receta para hacer soldaditos de pavía y me topado con tu blog. Me ha encantado tu receta. La seguiré, a ver qué tal.
ResponderEliminar¡Ah! Y me ha cautivado la historia de la receta. Jamás pensé que tuviera una historia y me ha parecido preciosa.
¡Que tengas una buena semana!
Hola Ana, a mí me encanta la historia creo que cada receta posee la suya propia, su señas de identidad, que muchas veces nos superan.
EliminarSeguiremos trabajando y buscando curiosidades y recetas hermosas que nos hagan más fácil la vida...
Gracias por estar.
Ricardo.
Estaba intentando localizar la auténtica y original receta de los "Soldaditos de Pavía". La probaré. Espero que estén tan buenos como yo los recuerdos de mi niñez.
ResponderEliminarSaludos y gracias por la receta.
Mi madre, andaluza de Graná, los hacía con bacalao desmigao mezclado con harina, perejil, sal, comino, azafrán y harina con bicarbonato. Cogía la masa con cuchara sopera y la freía en aceite muy caliente. Hoy los he comido en La Taberna del Corcho, San Lorenzo de El Escorial. Buenísimos. Grandes.Con el bacalao en tiras. La receta me parece que es igual a la que aquí he visto. La guardo para ver si so capaz de hacerlos igual
ResponderEliminarGracias por la aportación.
EliminarSaludos, Ricardo.
Ñam ñam ñam
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